Diferencia entre revisiones de «Henri-Frédéric Amiel»
Contenido eliminado Contenido añadido
Sin resumen de edición |
|||
Línea 25: | Línea 25: | ||
<!-- Agregar las citas por orden alfabético --> |
<!-- Agregar las citas por orden alfabético --> |
||
* |
* «Cuando mi amigo está infeliz, voy a su encuentro; cuando está feliz, espero que me encuentre.» |
||
* |
* «Cuesta mucho trabajo que la libertad vuelva a la franca unidad del instinto.» |
||
* |
* «Dime lo que crees ser y te diré lo que no eres.» |
||
* |
* «El amor es el olvido del yo.» |
||
* |
* «El cielo, el infierno y el mundo entero, está en nosotros.» |
||
* |
* «El destino puede seguir dos caminos para causar nuestra ruina: rehusarnos el cumplimiento de nuestros deseos y cumplirlos plenamente.» |
||
* |
* «El hombre que pretende verlo todo con claridad antes de decidir nunca decide.» |
||
* |
* «El hombre se eleva por la inteligencia, pero no es hombre más que por el corazón.» |
||
* |
* «El tiempo no es sino el espacio entre nuestros recuerdos.» |
||
* |
* «El misterio nos asedia, y justamente lo que vemos y hacemos todos los días es lo que oculta la mayor suma de misterios.» |
||
* |
* «Hacer con soltura lo que es difícil a los demás, he ahí la señal del talento; hacer lo que es imposible al talento, he ahí el signo del genio.» |
||
* |
* «La crítica convertida en sistema es la negación del conocimiento y de la verdadera estimación de las cosas.» |
||
* |
* «La divagación es el domingo del pensamiento.» |
||
* |
* «La inconstancia lo echa todo a perder; no deja que ninguna simiente germine.» |
||
* |
* «La verdadera [[humildad]] consiste en estar satisfecho.» |
||
* |
* «La vida es un aprendizaje de renunciamiento progresivo, de continua limitación de nuestras pretensiones, de nuestras esperanzas, de nuestra fuerza, de nuestra libertad.» |
||
* |
* «La vida no es más que un tejido de hábitos.» |
||
* |
* «Mira dos veces para ver lo justo. No mires más que una vez para ver lo bello.» |
||
* |
* «No creo que ningún placer que podamos obtener de nuestras emociones llegue a igualar esos momentos de paz silenciosa que son atisbos de los gozos del paraíso...Se siente una armonía interior libre de la más mínima agitación o tensión. En esos momentos el estado del alma es solemne, semejante quizá a su condición más allá de la tumba. Se trata de felicidad, según entienden los orientales, la felicidad del eremita que se halla libre de deseo y conflicto, y que sencillamente adora en plenitud de dicha...» |
||
**''Fuente: Diario.'' |
|||
* |
* «No niego los derechos de la democracia; pero no me hago ilusiones respecto al uso que se hará de esos derechos mientras escasee la sabiduría y abunde el orgullo.» |
||
* |
* «¿Qué es un espíritu cultivado? Es el que puede mirar las cosas desde muchos puntos de vista.» |
||
* |
* «Se entiende a las [[mujer]]es como se entiende el lenguaje de los pájaros: por intuición o de ninguna manera.» |
||
* |
* «Si existe algún conflicto entre el mundo natural y el moral, entre la realidad y la conciencia, la conciencia es la que debe llevar la razón.» |
||
* |
* «Sin pasión, el hombre sólo es una fuerza latente que espera una posibilidad, como el pedernal el choque del hierro, para lanzar chispas de luz.» |
||
* |
* «Toda necesidad se calma y todo vicio crece con la satisfacción.» |
||
* |
* «Tu cuerpo es templo de la naturaleza y del espíritu divino. Consérvalo sano; respétalo; estúdialo; concédele sus derechos.» |
||
* |
* «Un error es tanto más peligroso cuanta más cantidad de verdad contenga.» |
||
* |
* «Una burbuja de aire en la sangre, una gota de agua en el cerebro, bastan para que el hombre se desquicie.» |
||
* |
* «Una manera laboriosa de no ser nada, es serlo todo; de no querer todo; de no querer nada, es quererlo todo.» |
||
* |
* «Una religión sin misticismo es como una rosa sin perfume.» |
||
* |
* «Vivimos mientras nos renovamos.» |
||
* |
* «Las mujeres desean ser amadas no porque sean bonitas, o buenas, o bien educadas o graciosas o inteligentes, sino por ser ellas mismas.» |
||
{{DEFAULTSORT:Amiel, Henri Frederic}} |
{{DEFAULTSORT:Amiel, Henri Frederic}} |
Revisión del 05:54 3 may 2018
Henri-Frédéric Amiel | |||||||||||
---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|
«El amor es el olvido del yo». |
|||||||||||
Véase también | |||||||||||
Biografía en Wikipedia. | |||||||||||
Datos en Wikidata. | |||||||||||
Esta página contiene citas de una persona fallecida hace 143 años. | |||||||||||
Henri-Frédéric Amiel (n. Ginebra; 27 de septiembre de 1821 – m. ibid.; 11 de mayo de 1881) fue un filósofo y moralista suizo, autor de un célebre Diario.
Citas
- «Cuando mi amigo está infeliz, voy a su encuentro; cuando está feliz, espero que me encuentre.»
- «Cuesta mucho trabajo que la libertad vuelva a la franca unidad del instinto.»
- «Dime lo que crees ser y te diré lo que no eres.»
- «El amor es el olvido del yo.»
- «El cielo, el infierno y el mundo entero, está en nosotros.»
- «El destino puede seguir dos caminos para causar nuestra ruina: rehusarnos el cumplimiento de nuestros deseos y cumplirlos plenamente.»
- «El hombre que pretende verlo todo con claridad antes de decidir nunca decide.»
- «El hombre se eleva por la inteligencia, pero no es hombre más que por el corazón.»
- «El tiempo no es sino el espacio entre nuestros recuerdos.»
- «El misterio nos asedia, y justamente lo que vemos y hacemos todos los días es lo que oculta la mayor suma de misterios.»
- «Hacer con soltura lo que es difícil a los demás, he ahí la señal del talento; hacer lo que es imposible al talento, he ahí el signo del genio.»
- «La crítica convertida en sistema es la negación del conocimiento y de la verdadera estimación de las cosas.»
- «La divagación es el domingo del pensamiento.»
- «La inconstancia lo echa todo a perder; no deja que ninguna simiente germine.»
- «La verdadera humildad consiste en estar satisfecho.»
- «La vida es un aprendizaje de renunciamiento progresivo, de continua limitación de nuestras pretensiones, de nuestras esperanzas, de nuestra fuerza, de nuestra libertad.»
- «La vida no es más que un tejido de hábitos.»
- «Mira dos veces para ver lo justo. No mires más que una vez para ver lo bello.»
- «No creo que ningún placer que podamos obtener de nuestras emociones llegue a igualar esos momentos de paz silenciosa que son atisbos de los gozos del paraíso...Se siente una armonía interior libre de la más mínima agitación o tensión. En esos momentos el estado del alma es solemne, semejante quizá a su condición más allá de la tumba. Se trata de felicidad, según entienden los orientales, la felicidad del eremita que se halla libre de deseo y conflicto, y que sencillamente adora en plenitud de dicha...»
- Fuente: Diario.
- «No niego los derechos de la democracia; pero no me hago ilusiones respecto al uso que se hará de esos derechos mientras escasee la sabiduría y abunde el orgullo.»
- «¿Qué es un espíritu cultivado? Es el que puede mirar las cosas desde muchos puntos de vista.»
- «Se entiende a las mujeres como se entiende el lenguaje de los pájaros: por intuición o de ninguna manera.»
- «Si existe algún conflicto entre el mundo natural y el moral, entre la realidad y la conciencia, la conciencia es la que debe llevar la razón.»
- «Sin pasión, el hombre sólo es una fuerza latente que espera una posibilidad, como el pedernal el choque del hierro, para lanzar chispas de luz.»
- «Toda necesidad se calma y todo vicio crece con la satisfacción.»
- «Tu cuerpo es templo de la naturaleza y del espíritu divino. Consérvalo sano; respétalo; estúdialo; concédele sus derechos.»
- «Un error es tanto más peligroso cuanta más cantidad de verdad contenga.»
- «Una burbuja de aire en la sangre, una gota de agua en el cerebro, bastan para que el hombre se desquicie.»
- «Una manera laboriosa de no ser nada, es serlo todo; de no querer todo; de no querer nada, es quererlo todo.»
- «Una religión sin misticismo es como una rosa sin perfume.»
- «Vivimos mientras nos renovamos.»
- «Las mujeres desean ser amadas no porque sean bonitas, o buenas, o bien educadas o graciosas o inteligentes, sino por ser ellas mismas.»