Ernest Renan
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Joseph Ernest Renan | |||||||||||
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![]() «Los golpes de la adversidad son muy amargos, pero nunca estériles». |
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Esta página contiene citas de una persona fallecida hace 131 años. | |||||||||||
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Ernest Renan (Tréguier (Francia), 27 de febrero de 1823 – París, 2 de octubre de 1892), fue un pensador francés.
Citas[editar]
- «Desde el principio de mi carrera intelectual, acerté al creer firmemente en la Ciencia y tomarla como fin de mi vida».[1]
- «Dí de vez en cuando la verdad para que te crean cuando mientes».[2]
- «El éxito oratorio o literario se debe siempre a la misma causa: la absoluta sinceridad».[3]
- «El más sencillo escolar conoce ahora verdades por las cuales Arquímedes hubiera sacrificado su vida. ¿Qué no daríamos nosotros para que nos fuese posible echar una ojeada furtiva sobre tal o cual libro que servirá para las escuelas primarias dentro de cien años?»[4]
- «Es cierto que no se puede ser poeta sino a fuerza de idealismo, artista sino con fe y amor, escritor más que con lógica, elocuente orador solo a base de pasión de la buena y libertad».[5]
- «Es posible que las hipótesis de Darwin sean juzgadas a este respecto como insuficientes o inexactas; pero sin duda se encuentran en el camino de la gran explicación del mundo y la verdadera filosofía».[6]
- «Hay circunstancias en que una mentira es el más santo de los deberes».[7]
- «Imaginemos una Humanidad diez veces más fuerte que la nuestra; esa Humanidad sería infinitamente más religiosa».[8]
- «Las verdades que revela la ciencia superan siempre a los sueños que destruye».[9]
- «Lo que constituye una nación no es hablar la misma lengua o pertenecer a un mismo grupo etnográfico, es haber hecho juntos grandes cosas en el pasado y querer hacerlas aún en el porvenir.» [10]
- «Los golpes de la adversidad son muy amargos, pero nunca estériles».[11]
- «Si un suceso venido de fuera no me hubiese sacado bruscamente del honesto entorno, aunque limitado, en que pasé mi infancia, habría conservado la fe toda mi vida».[12]
- «Tenemos que someternos a las leyes de la naturaleza, de la que somos manifestaciones: quedan el cielo y la tierra».[13]
- «Un inmenso río de olvido nos arrastra hasta un abismo sin nombre».[14]
- «Una nación es un alma, un principio espiritual».[15]
Referencias[editar]
- ↑ L'Avenir de la Science (Pensées de 1848),p. XIX; (1890).
- ↑ Señor (1997), p. 553.
- ↑ Ortega (2013), p. 3008.
- ↑ Renan, Ernest (15 abr. 1888). «Recuerdos de la infancia y de la juventud». El Ripollés (8): 1-2.
- ↑ Discurso de ingreso de Ernest Renan en la Academia Francesa el 3 de abril de 1879, s/p
- ↑ (1876). Dialogues et Fragments Philosophiques, pp. 163-164
- ↑ Señor (1997), p. 369.
- ↑ Grant Duff, Mountstuart E. (1883). Ernest Renan – In Memoriam, p. 123
- ↑ Señor (1997), p. 83.
- ↑ Citado en González Navarro, Francisco. España, nación de naciones: el moderno federalismo. Eunsa ed., 1993. ISBN 9788431312541. p. 63.
- ↑ Señor (1997), p. 10.
- ↑ NODÉ-LANGLOIS, Béatrice. ERNEST RENAN – SOUVENIRS D'ENFANCE ET DE JEUNESSE. CLUB DE LECTURE:p. 7.
- ↑ Chincholle, Charles (8 oct. 1892). «Les Obsèques de M. Renan». Le Figaro (Paris): 2.
- ↑ Ortega (2013), p. 2976.
- ↑ ¿Qué es una nación? (1882), p. 10
Bibliografía[editar]
- Ortega, Arturo. El gran libro de las frases célebres. Penguin Random House Grupo Editorial. México, 2013. ISBN 6073116314, 9786073116312. (En Google Books.)
- Señor, Luis (1ª ed. 1997 / 2017). Diccionario de citas. Espasa Calpe. ISBN 8423992543.